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martes, 18 de mayo de 2010

Menú

Está muy bien la cosa. El pasado lunes (ayer, para más inri), me ocurrió una cosa bastante curiosa. No sé si será cosa del euro (€) o qué, pero el caso es que me hizo bastante gracia (por los mismos cojones).
Estando en el lugar de autos, véase un restaurante cualquiera de una localidad cualquiera de una provincia cualquiera (es en Fuentes, mi lugar de trabajo) y habiendo pedido un solo plato de los dos que se ofertan en el menu, con la sana intención de ingerir menos calorías y así reducir mi más que ingente masa abdominal y/o reducir el estado somnoliento post almuerzo, y un refresco burbujeante aparte del que se oferta en el menú del día, el susodicho (yo) se dispone a abonar felizmente la cuenta para, con ello, reanudar con toda tranquilidad su alegre jornada laboral, el amable camarero que regenta el restaurante anteriormente citado, tanto al susodicho (yo otra vez) como al resto de sus compañeros les lee la cuenta: 8.50€ por persona.

Para gran sorpresa de todos los asistentes, el precio no varía por haber pedido sólo un plato del menú. Al momento el simpático camarero rectifica y vuelve a dirigirse a su público para anunciar que se ha equivocado y que hay uno de los menús cuyo importe asciende a 9.50€, refiriéndose al menú de otro compañero que había pedido un refresco de más. Después de la sorpresa inicial, el susodicho (copón, habla en primera persona) interroga al encargado con el fin de esclarecer el extraño suceso. Tras una primera esquiva aduciendo a que ese importe es el que le dio el otro camarero, se dispone, siempre amablemente, a volver a hacer la cuenta. La respuesta al igual de tajante sigue siendo confusa aun pasado el tiempo: "claaaaaaaaaro, 7.50€ del menú porque ha pedido un plato menos y 1€ por la cocacola que había pedido de más, está clarísimo". Ésto último fue lo que más dolió.

Ahora sería momento para sacar conclusiones: ¿Quizás en ese restaurante un refresco vale igual que un primer plato?. Si un refresco vale 1€, un primer plato vale 1€ y, por lógica, un segundo plato vale 1€, ¿por qué si suman 3€ nos cobran 8.50€?. ¿Se deberá ese drástico aumento al postre?. ¿Me podría pedir la semana que viene el primer plato que no me comí esta semana y abonar 1€? (sería su justo valor). ¿Tanta cara de tontaco tengo?

4 comentarios:

Txemiya dijo...

yo ya te digo yo, las cuentas las hacen bien hechas... llegas a saberlo pides el plato que valía solo un leru!

Duende dijo...

Nada de cara de tontaco... es mucha cara dura la que veo yo en ese restaurante... Con lo bien que hace las cuentas el maestro y no le salen... A ver quién ha enseñado a ese camarero a sumar!!!!

Encarni dijo...

¡Vaya tela con el camarero! Con no ir más veces... asunto arreglado. Que una cosa es ser buena persona y no montar el pollo y otra que te la vuelvan a hacer. En fin, saludos maestro. ¡Qué bien verte por aquí!

Elena dijo...

No te creas tú que esto de los precios raros de los menús es exclusivo de ahí. A mí, incluso me han llegado a cobrar lo mismo sin pedirlo todo, "es precio cerrado", me dicen. Menos mal que en mi actual cole hay comedor, aunque el precio de éste también sube año tras año...